Palabras de inicio 3ra jornada congreso programático PACh.

tercera jornada congreso

La construcción de un Estado socialista en chile no se declara con un decreto legal simplemente, el Estado socialista se construye y se conquista, es la expresión de la participación del pueblo y su soberanía, es la continuidad histórica que se remonta a los inicios del movimiento obrero de fines del 1890 y a comienzo del siglo XX que tienen su máxima expresión con el gobierno de la unidad popular encabezada por nuestro compañero Presidente Salvador Allende.

La lucha por la emancipación y el fin de la explotación de hombres, mujeres, ancianos y niños ha sido la lucha por el socialismo, el que quiera desconocer eso es que no entiende de la lucha de clases ni de la historia del movimiento obrero, el sacrificios de miles de trabajadores y políticos revolucionarios ha sido por emprender el camino socialista, en eso Salvador Allende es claro en sus discursos y en su coherencia ética en donde su sacrificio es la antorcha que nos ilumina a no perder el rumbo.

En el contexto internacional, la participación del pueblo en la toma de decisiones políticas, la soberanía és el elemento revolucionario que se opone al imperialismo y las transnacionales, a  la injerencia extranjera devoradoras de recursos naturales y devoradoras de los recursos humanos, por lo tanto, la contradicción principal del momento histórico es: Un Estado socialista soberano, versus el imperialismo global, sus empresas y sus ejércitos transnacionales subsidiarios.

 

El Estado soberano y socialista de Chile,  la superación de la dominación imperialista y neoliberal

En el mundo actual el imperialismo Norteamericano como Europeo, han implementado un sistema económico y político a sangre y fuego en todos los rincones del mundo. Su doctrina neoliberal ha despojado de su independencia a los Estados¸

·         En donde ha existido resistencia por algún gobierno, estos han sido bloqueados económicamente, aplicando una política de ahogo de su capacidades productivas.

·         En donde no han podido coaptar a sus ejércitos, estos han sido destruidos en complicidad con los partidos burgueses y fascistas.

·         Cuando los generales y altos mandos han sido comprados, estos han provocado sangrientos golpes de Estado para instalar las políticas imperiales.

A paso seguido una vez instaladas las fuerzas de ocupación o fuerzas nacionales lacayas de las transnacionales, inmediatamente comienzan con una campaña sostenida en la destrucción del Estado, despojando  su poder económico y político, vendiendo todas sus empresas productivas.

·         En el ámbito social al Estado lo han liberado de su responsabilidad que tiene con el desarrollo del bienestar de su pueblo, privatizando la salud, la educación, los servicios básicos como electricidad, aguas, gas, petróleo y sus derivados, comunicaciones, transporte, carreteras etc.

·         Por último, al ejército lo convierten en una fuerza dependiente técnica e ideológicamente de Estados Mayores Imperiales.

En resumen, al Estado lo minimizan al punto de ni siquiera ser un mediador de los conflictos de intereses de las clases sociales, como en el siglo pasado, el Estado del siglo XXI es solo un garante de los intereses de las transnacionales, facilitadora de la especulación de capitales y facilitadora de la super explotación de los recursos naturales por las grandes corporaciones. Estas características políticas y económicas que hoy afectan al mundo y a nuestro país, son fuertemente antagónicas con los intereses del desarrollo y bienestar del pueblo y la clase trabajadora, hoy el desarrollo de la industria nacional choca con los intereses de la industria extranjera, la extracción de nuestros recursos naturales en beneficio del pueblo de chile, choca con los de las  transnacionales, hoy las transnacionales nos despojan de nuestro futuro y prosperidad, ya que estos van vaciando nuestras reservas estratégicas, hoy este escenario , nos pone en una situación de un país ocupado por fuerzas externas a los intereses de chile, esto nos lleva a afirmar el carácter patriótico de la lucha, el patriotismo tiene que entenderse bajo el contexto actual, el patriotismo es la respuesta a la intervención económica y política imperialista, sin embargo nuestro patriotismo debe ser solidario con los trabajadores del mundo, que corren la misma suerte que los trabajadores chilenos, nuestro patriotismo es solidario con los países que enfrentan al imperialismo para el beneficio de su pueblo, hoy las  organizaciones que defienden los intereses de las transnacionales y al sistema imperial son nuestros enemigos. Nuestra lucha es patriótica, revolucionaria y socialista. Nuestra lucha es hacer de chile un país feliz, solidario, soberano desarrollado y poderoso.

En el chile de hoy el capitalismo y su fase neoliberal no han podido resolver la precariedad en el trabajo, la desigualdad contra la mujer, la vulnerabilidad con los niños y la juventud, el acceso a la salud y educación sigue siendo un privilegio, el actual sistema económico y político ha sembrado nuestra sociedad con valores morales contrarios a la sana convivencia, la delincuencia se ha transformado en la consecuencia del abandono del Estado y de la ausencia de oportunidades dignas a un pueblo que se le ha embrutecido con el bombardeo constante del consumismo, las ciudades se han transformado en hábitat estresantes y enajenantes del individuo, en el campo existe un abandono más bárbaro por parte del Estado, la existencia de grandes porciones de tierra ociosas, en donde los jóvenes por falta de expectativas son arrojados a las ciudades en el mejor de los casos y al menos afortunado termina sin un futuro digno sumergido en las drogas y expuesto a las bandas criminales, también en las regiones nos encontramos con lo que podría ser una bendición de la naturaleza contar con recursos mineros o agrícolas, los que paradójicamente se transforman en sus verdugos, disfrazados en algunas localidades como transnacionales del latifundio o como depredadores y contaminantes de la tierra que los vio nacer, esta situación es posible transformarla en beneficio del pueblo, ya que nuestro país es un país inmenso en riquezas mineras y microclimas, que pueden sin duda, con una explotación amigable con el medio ambiente, producir el bienestar social que nuestra gente se merece. Podemos los chilenos con las riquezas de nuestra tierra y con la industrialización del país resolver los problemas como la vivienda, la salud, la educación, las pensiones, el buen vivir del pueblo.

La construcción paso a paso del Estado socialista y soberano.

Para la construcción del Estado socialista, debemos que tener claro que para tener éxito, es fundamental la participación del pueblo organizado y preparado para su defensa y conquista de nuevos horizontes estratégicos, a diferencia de la democracia actual, el pueblo no puede ser mero espectador  y llamado a sufragar cada 4 o 5 años, por candidatos impuestos por cúpulas partidarias y bendecidas por el imperialismo norteamericano, para que nuestro pueblo sea protagonista de las decisiones políticas y económicas, tiene que existir un mecanismo legal que garantice su participación en la toma de decisiones, relacionadas con un plan de desarrollo que proporcione  el bienestar del pueblo, en donde el asambleísmo no es suficiente a la hora de ser practico, debe existir una estructura, un cuerpo que canalice la toma de decisiones, en ese sentido las JJVV son la base de la pirámide del Nuevo Estado.

Para que eso sea posible es necesaria una nueva ley de JJVV que reemplace la actual, la que le dará protagonismo y un real peso político y administrativo, empoderando a la comunidad la que en conjunto con el municipio aborden las problemáticas, dando soluciones y que verdaderamente interpreten el sentir de los barrios.

Estas problemáticas que queremos resolver y las visiones del país que queremos impulsar, lo podemos ir desarrollando en este congreso programático, en donde el programa de la unidad popular es la base política, económica y social que es el centro ideológico del Partido Allendista de Chile, así  como la figura de los caídos y la de Salvador Allende, son  nuestra guía ética y moral que nos interpela y nos llena de fuerza espiritual para llevar a la practica la revolución chilena en este siglo XXI.

Nuestro partido asumimos con plena dignidad y lealtad al pueblo el compromiso de levantar a los cuatro vientos el programa de la unidad popular, de llevar a su justa altura la figura del compañero presidente, ya que a través de su espíritu gigante, abrazamos las demandas del pueblo y sus derechos arrebatados por la dictadura de Pinochet y la administración neoliberales de la democracias de los acuerdos, implementadas por las fuerzas políticas que traicionaron y se sumaron a los poderes facticos e imperialistas para enterrar el proceso inconcluso de la construcción del socialismo en nuestra tierra.

 

Hoy nuestro deber es luchar por una patria socialista. Los allendistas nunca debemos perder la fe.

“ESTAS SON MIS ÚLTIMAS PALABRAS Y TENGO LA CERTEZA DE QUE MI SACRIFICIO NO SERÁ EN VANO, TRBAJADORES DE MI PATRIA TENGO FE EN CHILE Y SU DESTINO…

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